Trabajando con mis alumnos la educación en valores a través del cine, en concreto con la película El Cid (1961), de Anthony Mann, no he podido dejar de pensar lo actual que resulta si tenemos en cuenta los sucesos acaecidos en los últimos tiempos por el extremismo islámico.
Por otro lado, y viendo el nombre de este blog, esta película viene de perlas si queremos ambientarnos un poco antes de jugar una partida de Aquelarre e incluso de Alatriste (más adelante veremos por qué).
Pero veamos antes algunos datos técnicos y esperemos que el público joven le dé una oportunidad porque, francamente, la merece.
En efecto, la película es bastante antigua: nada menos que de 1961. Dura 172 minutos, su director es Anthony Mann y como actores principales tenemos a los geniales Charlton Heston y Sofía Loren. Está recomendada para todos los públicos.
Como hemos dicho, este obra tiene cincuenta y cuatro años, pero gran parte de su contenido no puede ser más actual y, a la vez, lanza un mensaje bastante interesante para los adolescentes de hoy en día.
La película plantea que es posible convivir en paz entre
distintas religiones. Además, juzga a los personajes por sus acciones, no por
la religión que profesan. Así, encontramos personajes que responden al
prototipo de héroes (valientes, leales, justos, honrados, misericordiosos, etc.)
en ambas religiones y, por contra, también hay cristianos y musulmanes
envidiosos, egoístas, traidores, mentirosos, etc.
Nada más comenzar presenciamos cómo el emir africano Ben Yusuf critica e increpa a los reyes moros que viven en la península
"Matad, arrasad. ¡Conquistad España!" |