Sed de Sangre: una alternativa a Vampiro

Sed de Sangre (Blood Dark Thirst en inglés) es un juego de Venger Satanis cuya traducción al castellano acaba de publicar la joven editorial española The Hills Press. Con Sed de Sangre podremos jugar partidas donde los jugadores interpretan a vampiros. ¿Pero esto no lo hacía ya Vampiro? Sí, pero Sed de Sangre es una alternativa igual de buena, e incluso mejor en algunos casos.

La portada no puede ser más llamativa.

La primera gran diferencia (y una de sus cualidades) con respecto a Vampiro: la Mascarada es su planteamiento. Sed de Sangre es un juego sencillo con reglas ligeras y poca ambientación (solo la necesaria).


Aquí no vas a encontrar largas descripciones de habilidades, clanes, sectas o disciplinas. Y es que los números hablan por sí solos: tamaño A5, 50 páginas en total, de las cuales 28 corresponden a las reglas y la ambientación. Las 22 restantes son dos aventuras. Es decir, es un juego que puedes leer (o releer antes de una partida) en una o dos horas, y esto para mí es excelente. Por supuesto, el manual es comodísimo de leer, guardar y transportar.

Comparación de tamaño con un manual típico de Vampiro.

Añadamos que el interior es a todo color, el gramaje de las páginas es muy bueno, el tamaño de la letra es generoso y que cuesta (solo) 12 € (3,99 € el pdf). Ah, y algunas ilustraciones son espectaculares, empezando por la portada y la contraportada (esta última, exclusiva de la edición española).

Evidentemente, este Sed de Sangre es mucho más cómodo y manejable que la edición de bolsillo de Vampiro 20 aniversario (recordemos que esta tiene 528 páginas y pesa 0,8 kg).

Comparativa de tamaño con el V20 de bolsillo.

Sed de Sangre se queda en los 150 gr.

En fin, que en lo que respecta a formato y a la relación calidad-precio, yo estoy encantado.

Veamos el contenido.

Sed de Sangre va al grano. Por no tener, no tiene ni índice (tampoco lo necesita). En cierta manera, quizá no sea un juego recomendable para alguien que nunca ha jugado a rol. Y es que para conseguir esa condensación de información se elimina lo evidente o innecesario. 

Por ejemplo, hay veinte defectos, pero estos no se definen ni explican. Se parte del supuesto de que el DJ sabe tratarlos solo con leerlos: Celoso, Vengativo, Cobarde... Lo mismo pasa con las habilidades; hay veinte, pero se espera que tanto DJ como jugadores sepan de lo que van (y lo sabemos, ¿no?): Percepción, Primeros auxilios, Disparar, Sigilo...

Con los poderes especiales de los vampiros pasa lo mismo. Aquí se dedica un breve párrafo a explicar en qué consisten, pero se evitan páginas y páginas a describir las distintas mecánicas como pasa en Vampiro (con un punto en Protean haces esto, con dos esto otro...). En Sed de Sangre nos encontramos lo siguiente:

"Cambio de forma: El vampiro puede transformarse en niebla, o convertirse en un murciélago o en un lobo".

Ya está. No hay más mecánicas que establezcan, por ejemplo, cuánto tiempo puedes estar transformado en murciélago o cuánto daño hace el lobo en caso de ataque. Eso lo decidirá el DJ llegado el momento. Evidentemente, se da preferencia a que la partida fluya y no se atasque por culpa de reglas y más reglas.

Lo que no sabría decir con seguridad es si alguien que nunca haya jugado a Vampiro va a tener problemas con el trasfondo, pues la síntesis también se da aquí. El que conozca Vampiro no va a tener ninguna dificultad, y es que son muchos los conceptos y términos que Sed de Sangre toma del juego original de White Wolf: cazadores, hombres lobo, magos, sire, frenesí, Reserva de Dados, Puntos de Humanidad, de Sangre, de Voluntad... 

En otros conceptos cambia ligeramente el nombre, como el ghoul, que aquí se llama "esclavo vampírico", o el vínculo de sangre, que aquí es "lazo de sangre". La figura del Príncipe, el vampiro que gobierna la ciudad, también existe, solo que en Sed de Sangre no tiene un nombre específico.

¿Y cómo se juega?

Las reglas son muy sencillas, lo cual agradezco personalmente, y es lo que últimamente parece que se demanda.

Solo se usan dados de 6 caras. A la hora de realizar una acción tiras tantos dados de seis como tengas en tu Reserva de Dados y te quedas con el resultado mayor. Así de sencillo. Luego el DJ consulta la siguiente tabla:

Como podéis ver, esta tabla se la aprende uno en cinco minutos y ya no tiene que consultarla más.

Queda por determinar cuántos dados hay en mi Reserva de Dados. Pues esto también es muy fácil, porque en la creación de PJ habrás elegido tres habilidades que se te dan muy bien (en esas tienes 3D6) y tres habilidades que se te dan mal (en esas tienes 1D6); en el resto tienes 2D6.

Por último, si la situación está a tu favor tienes ventaja y eso te añade 1D6; y al contrario, si la situación está en tu contra pues tienes desventaja y pierdes 1D6 de tu Reserva.

La hoja de PJ es un espejo de lo sencillo que es el sistema.

El resto es muy parecido a Vampiro, aunque más simplificado. Por ejemplo, aquí un vampiro también gasta un Punto de Sangre cada vez que se despierta, y los Puntos de Sangre se pueden utilizar para activar los poderes sobrenaturales de los chupasangres (las Disciplinas de Vampiro). Asimismo, con una Humanidad baja (un punto) el vampiro tiene un aspecto bestial, mientras que con seis puntos parece un humano.

El libro termina con dos aventuras, El sobre negro y El monstruo. Son muy diferentes entre sí. La primera es muy abierta y su descripción es cortísima (apenas cuatro páginas). Podríamos decir que en realidad es un gancho de aventura y una tabla de encuentros, dejando el final abierto a las decisiones de los PJ. La segunda es de Ricard Ibáñez y ocupa trece páginas. A diferencia de la anterior, esta es más lineal. Es una aventura de investigación con toques macabros. A mí personalmente me han gustado las dos y creo que son dos buenos ejemplos de lo que puede dar este juego.

Conclusión

A estas alturas puede que alguien piense que esto es una copia barata de Vampiro. E incluso que teniendo ya un manual de Vampiro, ¿para qué comprar otro juego parecido? Eso ya depende de cada uno. 

En mi caso, Vampiro: La Mascarada siempre me ha gustado (y me sigue gustando), pero no me arrepiento para nada de haber comprado este Sed de Sangre. Es más, estoy encantado de haberlo descubierto. Y la principal razón es porque estoy seguro de que Sed de Sangre va a ver mesa antes que Vampiro.

La agilidad de su sistema de juego y la no necesidad de conocer un trasfondo detallado son sus grandes ventajas con respecto al juego original. 

La contraportada: una maravilla.

En definitiva, Sed de Sangre es un juego con el que contar historias de vampiros sin necesidad de que tus jugadores dominen previamente el amplio trasfondo de Vampiro; y que tú, como DJ, tampoco tengas que tener en mente un gran número de mecánicas.

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