Aquelarre 2ª edición: ¿merece la pena?

Desde el punto de vista del jugador (no del coleccionista) uno puede hacerse la siguiente reflexión: tengo ya la 1ª edición de Aquelarre (1990), la de Joc Internacional, y la 3ª (2011), la de Nosolorol. ¿Me puede interesar acaso la 2ª edición? Es decir, tengo ya la original y condensada de Joc y la nueva y completa de Nosolorol. ¿Qué me puede aportar que no tenga ya con las anteriores?

Una 2ª edición de la editorial La Caja de Pandora que, además, no tiene muy buena fama entre algunos aficionados. Yo me atrevería a llamar a esta 2ª edición "el patito feo", entre otros motivos porque a muchos no nos gustó el estilo artístico de esta línea. Por poner pegas, también podríamos decir que es una edición que presenta bastantes erratas (característica que acompañó al resto de productos de La Caja de Pandora) y que además está encuadernado en rústica, siendo el único manual básico de Aquelarre en presentar tapa blanda.

Con esta presentación ya me dirán ustedes que a la porra con la 2ª edición. Yo, sin embargo, mantengo que puede ser muy útil para el director de juego a pesar de tener las otras dos. ¿Que por qué? Por tres razones:

1. La primera razón es que podemos considerar esta edición como un manual de combate, es decir, el ideal para llevar a la partida o a unas jornadas. Al manual de Joc seguro que le tenemos mucho cariño por ser el primero y es muy posible que lo tengamos medio desencuadernado de la matraca que lleva. Por otro lado, el manual de Nosolorol pesa mucho para transportarlo y seguro que no queremos que ninguno de nuestros jugadores toque sus bellas páginas con los dedos grasientos del aceite de las papas fritas o, peor, que alguno derrame su cerveza encima de él (la que se puede liar en este último caso).

"666" como marca de agua...

El básico de La Caja de Pandora es, por tanto, el mejor para llevar a la partida: no es que vayamos a destrozarlo porque es el que menos nos gusta, pero si se dobla una esquina por llevarlo en la mochila no nos duele tanto como con los otros dos.

2. En segundo lugar, el manual que nos ocupa es la única edición que contiene también las reglas para crear PJ y desarrollar aventuras en el Renacimiento o en el siglo de oro (siglo XVI y XVII), es decir, para jugar a Villa y Corte. Esto viene de perlas si queremos ambientar una partida en esta época y no tenemos los suplementos de Joc Rinascita o Villa y Corte. Y si los tenemos, también nos ahorramos transportarlos a la partida, que un segundo libro pesa más y además puede pasar como en el punto anterior.

3. En tercer lugar, esta 2ª edición incluye una muy buena campaña de Ricard Ibáñez, SCRIPTA BARCHINONE, dividida en seis partes. Como en toda buena aventura de Aquelarre se mezclan datos históricos de la época con buenas historias como la de "Las tres mujeres de Adán". Por supuesto que también intercala momentos de investigación con los de acción. Bueno, pues esta pedazo de campaña no se encuentra en otra edición.

Por otro lado, y como otro aliciente más, es la edición más barata de conseguir en la actualidad, encontrándose muchos ejemplares de segunda mano por menos de 20 €.

Ojo, conviene no confundir esta edición de 1999 (y tapa blanda) con otras dos reediciones de 2001 también de La Caja de Pandora. Estas son las ediciones a color en tapa dura (Aquelarre: La Tentación) y la posterior edición de lujo cuya cubierta imita el cuero. Lo advierto porque estas reediciones no incluyen la parte de "Villa y Corte".

Aquelarre: la tentación (abril de 2001): segunda edición revisada (a color y en cartoné)

Aquelarre, edición de lujo (agosto de 2001): 2ª edición revisada (a color y con la cubierta de imitación de cuero)

Bueno, pues una vez visto por qué puede resultar interesante para el DJ esta 2ª edición de 1999 vamos a hacer un pequeño análisis.

Título: Aquelarre: juego de rol demoníaco-medieval
Autor: Ricard Ibáñez
Edición: 2ª
Fecha: diciembre de 1999 (viernes 31)
Editorial: La Caja de Pandora (Barcelona)
Referencia: AQU 001
ISBN: 84-605-9896-9
Cubierta: rústica (tapa blanda)
Páginas: 208 en b/n y dos a color

La edición que nos ocupa también es conocida por los nombres de "Aquelarre: vademécum", por incluir todas las reglas y ayudas que habían ido apareciendo hasta la fecha, o "edición negra", por el color de su cubierta y para diferenciarlo del azul de la primera.

Recuerdo que el libro en su época, nada más abrirlo, impresionaba: portada toda negra, sin dibujos, solo con el logo de Aquelarre, dos páginas a color ya al principio, una de un aquelarre y otra de un asedio a un castillo... Pero pronto descubriríamos las primeras erratas en la contraportada ("está" sin tilde) y en la página de créditos: "és, ilustaraciones", "Ordenes" y "ANGEL" sin tilde, etc. Da muy mala impresión encontrar estas erratas en las primeras páginas: da la impresión de dejadez o de aficionados. Y es que si no habían revisado estas primeras páginas que sirven de presentación, ¿qué podíamos esperar en el resto del manual?

Además, no pueden argumentar que tomaron la decisión de no poner tildes a las mayúsculas porque en las páginas 16 y 17 encontramos "LADRÓN" (con tilde) y "MEDICO" (sin ella): simplemente, no lo revisaron .

Lo peor de estos descuidos es seguramente el de la ficha de PJ, porque al fin y al cabo es lo que se utiliza durante la partida. En la hoja de PJ se les olvidó poner las competencias de "Conocimiento mineral" y "Conocimiento mágico", además de los "Puntos de Concentración", gran fallo porque estas dos últimas características se usan mucho en este juego. Otro error que afecta mucho a las partidas es dejar muy poco espacio para el "Daño del arma" (y nada para el "Modificador al daño") y en cambio mucho para "Fuerza mínima".

Contenido.

Como hemos dicho, esta edición sirvió de recopilación de todas las reglas y ayudas aparecidas en los suplementos editados hasta la fecha por Joc Internacional y la revista Líder. Así, ya no tenías que utilizar el Lilith para el "Combate de masas" porque venía aquí, las ya mencionadas reglas y ambientación de Villa y Corte (Cosas que hacer en el Madrid del siglo XVII...), "El arte de la guerra" o "La Santa Inquisición" de Rinascita, "La imagen del diablo" junto con el bestiario infernal de Rerum Demoni, el Upiro del Dracs o las reglas para hacer PJ menores de 17 años y mayores de 22 que aparecieron en Rincón, por citar algunas.

También se incorporaron contenidos nuevos, como la sección "Ser mago en Aquelarre", donde Ricard daba una serie de consejos por si veíamos a nuestro alquimista pobre en combate, o la sección de "Angelicum Nature" del suplemento del mismo nombre que no llegó a editarse en tiempos de Joc. También son nuevas la sección de FAQ, con dudas frecuentes, y las aventuras "Marte y Venus", "Cuento de invierno" y "Los amantes, el Don Gil, 'la monja' y alguien más", esta última para Villa y Corte (más la campaña larga que ya hemos mencionado).

Otros contenidos se amplían, como el capítulo de "Santos, rezos y milagros" o el de hechizos, que si en la 1ª edición había 55, se añaden los 61 de Rerum Demoni, "Transformación en Upiro" del Dracs y alguno más que ahora mismo no localizo si es original de esta edición o de otro suplemento.

El libro incluía también un CD (el cual no tengo) que contenía música, imágenes de la sociedad de la época, castillos, además de libros, bibliografía, etc.

En resumen, mucho material disperso que por primera vez se reunía en un único volumen, por eso el sobrenombre de Aquelarre: vademécum. No en vano, se pasaba de las 100 páginas de la 1ª edición a 200.


Forma.

El aspecto gráfico  iniciado en este manual, y que acompañaría a la línea de Aquelarre durante la época de La Caja de Pandora, no gustó a muchos aficionados que se habían acostumbrado al de Joc Internacional. El estilo artístico que utilizaba Arnal Ballester, normalmente en las portadas y Montse Fransoy en el interior, se asemejaba al de las miniaturas medievales. A todo alumno de BUP le sonaba algo de los libros de Historia y, por tanto, nos parecía muy realista (aunque tuvo y tiene todavía sus detractores).

Miniaturas medievales.

El estilo de Manolo Carot y Emilio Fradejas, en cambio, parecía más un cómic y/o manga japonés, y eso a muchos nos chocó bastante. Dicen que las comparaciones son odiosas, pero a veces necesarias. Si observamos, por ejemplo, a la Lamia o al Follet de Montse Fransoy, vemos que son criaturas dotadas de expresividad. La Lamia en concreto da miedo con esos ojos... y el Follet, cuya descripción empieza con un "Criatura estúpida y perversa..." lo deja clavado.

 

 

Por el contrario, el Follet de esta 2ª edición, a su lado, parece un fantoche y la Meiga parece más una brujita de la suerte. ¿O qué me pueden decir de Lucifer, Silcharde y Astaroth? Son demonios superiores y no dan nada de miedo, más bien pena.

 

Lucifer, Silcharde y Astaroth, entre otros.

Sí es de agradecer que incluyeran una ilustración por cada criatura del bestiario y por cada clase de PJ como también hizo la versión precedente. También contrasta mucho ese estilo, que es el predominante, con otro muy realista, el de las criaturas no fantásticas (el perro, la vaca) o la catedral de Burgos (página 29).

Conclusión.

Después de esta crítica a la estética del libro, yo señalaría que no hay que quitarle méritos a esta 2ª edición. El problema es que a día de hoy, y al compararla con la 3ª, pierde mucho, pero en su época no estuvo mal. Además de servir de compendio con todas las reglas reunidas, nos aportó algo de ilusión, y es que Aquelarre volvía a editarse de manera oficial.

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